Elegir el calzado escolar adecuado es fundamental para la salud y el desarrollo de los pies de los niños. Un mal calzado puede generar problemas a largo plazo, afectando a su postura y provocando incomodidades que podrían evitarse fácilmente. A continuación, te presentamos las claves esenciales para seleccionar un calzado funcional, cómodo y saludable para tus hijos.
1. Material flexible y resistente
El material del zapato escolar juega un papel clave en la comodidad y salud de los pies. El calzado debe ser flexible en la parte delantera, permitiendo que los dedos se muevan con libertad y que el pie mantenga un movimiento natural al caminar. A la vez, el talón debe ser firme para ofrecer estabilidad y prevenir torceduras o lesiones derivadas de una sujeción insuficiente.
Es importante que los materiales sean transpirables, como el cuero, para evitar el exceso de sudoración y reducir el riesgo de irritaciones o infecciones.
2. Buen ajuste: ni apretado ni suelto
Un ajuste correcto es esencial para la salud del pie infantil. El calzado debe quedar bien ajustado, pero sin apretar demasiado. Es recomendable dejar aproximadamente un dedo de espacio entre el dedo más largo del pie y la punta del zapato, permitiendo el movimiento natural de los pies y considerando el crecimiento.
Si vamos a comprar cazado es mejor hacerlo al al final del día, cuando los pies tienden a estar un poco más hinchados, ya que asegura que el ajuste sea cómodo incluso cuando llevamos todo el día caminando.
3. Plantillas: estándar, salvo en casos específicos
La mayoría de los zapatos escolares incluyen plantillas estándar diseñadas para proporcionar un buen soporte y amortiguación general. Estas plantillas suelen ser suficientes para garantizar la comodidad y una adecuada distribución del peso durante la jornada escolar.
No obstante, si tu hijo presenta alguna alteración en la pisada, como pie plano o pronación excesiva, podría necesitar plantillas personalizadas. Estas plantillas son realizadas por un podólogo tras llevar a cabo un estudio biomecánico de la pisada, con el objetivo de corregir posibles patologías que puedan derivarse de una mala pisada, ayudando a prevenir problemas futuros en pies y articulaciones.
4. Cierre seguro: velcro o cordones
El cierre es un aspecto clave para garantizar la seguridad del niño. Los zapatos con velcro o cordones son ideales porque permiten un ajuste firme y cómodo, evitando que el pie se deslice dentro del zapato. Esto es importante para prevenir caídas o posibles torceduras. El velcro es particularmente útil para los niños más pequeños, mientras que los cordones ofrecen mayor sujeción en edades más avanzadas.
La importancia de elegir bien el calzado escolar
Seleccionar el calzado adecuado no solo afecta la comodidad diaria, sino que también es clave para prevenir futuros problemas podológicos, como deformidades, dolor en los pies y problemas en otras articulaciones. Al elegir un calzado que cuide de sus pies, estás invirtiendo en la salud y el bienestar a largo plazo de tu hijo.
En el Centro Podológico Goitia, estamos aquí para asesorarte en la mejor elección del calzado escolar. Si tienes dudas o necesitas una evaluación detallada, no dudes en consultarnos para asegurar el bienestar podológico de tus hijos.
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